1) Experiencias con huella personal y social
Mucho antes de llegar el buen tiempo, arrancan clásicos como el Festival Barnasants (del 21 de enero al 14 de abril), de música de autor, se venden abonos anticipados como el del Festival de Cine de Autor D’A (con oferta navideña) y de otros festivales y conciertos.
¿Una forma efectiva de hacer felices a los apasionados de la música o de un artista?

Aurora Feliú reinterpreta la trova cubana en Barnasants
Otra idea para sorprender y recordar puede ser una escapada cultural. Como los Caminos por La Mancha que propone Caminos del Guadiana, “recorridos guiados que se convierten en una experiencia sobre la naturaleza y cultura propia de la más extensa llanura de Europa”.
Regalar cultura dejará huella positiva también en la sociedad. ¿Sabía que en España la cultura aporta el 2,5% del PIB, más que el sector de la agricultura o el de las telecomunicaciones? Las actividades culturales también animan y diversifican nuestro turismo, atrayendo al 18% de los visitantes españoles y al 12% de los extranjeros que nos visitan.
Por otro lado, el 99% de las empresas culturales, que emplearon a medio millón de personas en 2015, son pequeñas y medianas empresas, según el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD).
2) Regalar sueños funciona
¿No sabe qué regalar? Obsequiar con cine es un acierto casi seguro: es la actividad cultural más popular y en crecimiento, aumentando la proporción de población que asiste del 49% al 54% en un año, según el MECD.
Existe una oferta diversa de bonos de entradas y tarjetas de socio y descuento en salas como las de Cine Ciutat (Palma de Mallorca), donde el asociado obtiene 12 entradas y pasa incluso a “ser propietario del cine”. Hay diferentes tipos de abonos también, según nuestras posibilidades, en los Cines Séptimo Oficio (Las Rozas, Madrid).
Y carnés para ir al cine todo el año con descuento por ejemplo en Cines Verdi (Barcelona y Madrid) y Cine Sur (Badajoz, Cádiz, Córdoba, Málaga, Toledo y Sevilla).
3) Regalar(se) una puerta abierta
Este regalo dura más que un instante o un día. ¿Por qué no un abono a una entidad cultural, como un teatro o un museo? Con ello, apoyará directamente su labor social de difusión de la cultura.
Por ejemplo, en Madrid, los socios de Teatro del Barrio pueden involucrarse en las propuestas críticas y creativas que organiza la cooperativa. O, en Barcelona, los “amigos del Teatre Tantarantana” tienen entrada gratis a una función en el día de su cumpleaños, con obras para grandes y pequeños.
Iniciar en la cultura desde una corta edad facilita que los más pequeños también se enganchen y disfruten de ella en sus diferentes formas. Si un 54% de la población va al cine, la cifra es de un 75% entre aquellos que también visitan museos, exposiciones y espectáculos en directo, según los datos del sector.
4) Suscripciones al placer de leer
Como los espectadores del cine, los lectores también han aumentado del 59% al 62% de la población en un año, según los últimos datos del MECD.
Regalar un libro dice mucho de nuestra relación con alguien. No es fácil, porque “exige conocer los gustos y la personalidad de la persona”, afirma el escritor Ignacio Martínez de Pisón. Pero “es el mejor regalo porque tiene la máxima concentración de la experiencia humana. Ahí lo tienes todo, todo el mundo posible, toda la ficción, la realidad”, según Antonio Muñoz Molina, como recoge El Cultural en Elogio y exaltación del libro como regalo.
Para facilitar la tarea, este año siete libreros que trabajan con Triodos Bank nos han recomendado siete libros diversos, con la característica común de que inspiran a mejorar nuestro mundo. O, en búsqueda del acierto, también es buena estrategia regalarse la experiencia de visitar librerías como La Felipa, desde 1944 en Madrid, y escuchar de primera mano el consejo de los especialistas.
Por otro lado, también puede ser apreciado el obsequio -o apuntarse uno mismo- a una suscripción a una publicación periódica de calidad. Hay tantas como pasiones personales, como se puede comprobar paseándose por el catálogo en catalán de la cooperativa Sàpiens Publicacions, desde la Historia a la Cocina.
O, por qué no, regalar una “cata” de lectura en forma de suscripción a varios meses de Ecohabitar, para los aficionados a la decoración y la construcción sostenibles, o Enderrock (en catalán), para los que no pueden vivir sin música o, para los amantes de los viajes, a un referente como Altaïr Magazine.
5) Un empujón para crear
Gran parte de la población es más que espectadora de la cultura y, como oficio o afición, también crea.
Porcentaje de la población activa en cada actividad artística (2014-2015):
Para ellos, hay una infinidad de grandes y pequeños cursos y talleres, que pueden ayudar a confirmar o a desarrollar su pasión.
De música, como en el Jazz Cultural Theatre of Bilbao o la Escola de Música Freqüències (Vilanova i la Geltrú, Barcelona). De teatro o televisión, como en la Escuela de Actores de Canarias o en Off, escuela de cine, teatro y TV (Valencia). De escritura, como en Laboratori de Lletres (Barcelona). O de baile, en Big South (Madrid), para iniciarse en serio o simplemente compartir un par de sesiones y regalar tiempo de diversión a la persona que queremos. Hay, por supuesto, otras posibilidades, como la oferta de Happy Yoga, para regalar bienestar.
“Si queremos preservar la cultura, debemos seguir creándola”, decía el filósofo holandés Joan Huizinga. Regalándola, además, obsequiaremos emociones que se preservan en el tiempo.
Regálame una idea
¿Alguna idea más de regalos culturales para compartir? Proponemos que estas fiestas nos regalemos ideas entre lectores del blog.
Objetos artísticos de otras culturas, participar en crowdfunding de obras artísticas… existe una infinidad de posibilidades.
Comparta su propia idea en los comentarios.
+ O descárguese la app Consumo Responsable Triodos para descubrir establecimientos culturales cerca de casa
Suscribirme a Blog Somos Triodos
Recepción por e-mail de los nuevos artículos del blog.